La importancia de una mejor
calidad de vida para la sociedad da origen al concepto de
«turismo sustentable»: la conservación de la diversidad biológica
en función del uso sustentable de los recursos naturales y
culturales de nuestros destinos turísticos.
Con respecto
a este tema la American Society of Travel Agents tiene
una serie de mandamientos:
Respete
la fragilidad de la tierra. Comprenda que si no decidimos
colaborar todos en su conservación, estos puntos de destino
bellos y únicos quizá no estén aquí para las próximas generaciones.
Deje
sólo las huellas de sus pies. Tome solamente fotografías.
No haga inscripciones. No ensucie. No se lleve «recuerdos»
de sitios históricos o zonas de naturaleza.
Para
dar mayor sentido a sus viajes, infórmese sobre la geografía,
costumbres, modales de cortesía y cultura de la región que
va a visitar. Deténgase y escuche a la gente. Estimule los
esfuerzos locales de conservación.
Respete
la intimidad y la dignidad de las personas. Pida permiso
para fotografiar a personas.
No
adquiera productos hechos de plantas o animales en peligro
de extinción, como marfil, conchas de tortugas, pieles y
plumas. Lea «Know Before You Go», la lista de productos
que no se puedan importar a Estados Unidos, publicada por
el Servicio de Aduanas de ese país.
Siga
siempre los senderos indicados. No perturbe a las plantas
ni a los animales en su hábitat natural.
Infórmese
y apoye programas u organizaciones orientadas a la protección
y conservación de la naturaleza.
Siempre
que sea posible, camine o utilice medios de transporte que
no dañen la ecología. Ruegue a los conductores de vehículos
públicos que apaguen los motores cuando el vehículo está
estacionado.